Desilusión de cuatro sentidos

El quinto se quedó durmiendo, y esperó a que lo despertasen para comenzar a romper su entorno. Así fue que ya no oyó, ya no escuchó, no olió, ni distingió más gustos... ahora sólo siente con sus manos lo que el tiempo le ofrece, y lo disfruta en carne propia.

jueves, 16 de diciembre de 2010

Ello vs. Superyó

La batalla entre ello y superyó
Disputan entre tantas cosas:
“Quién será el elegido para nuestro universo interior”
¿Quién dominará este pensamiento?

Y se olvidan que yo también quiero ser
Ni Superyó ni Ello se acuerdan de escucharme

Cuando Ello habla, Superyó lo manda al rincón
Y así, callado, Ello se escapa y escupe alrededor

Pero quiero ser yo, no más conflictos internos
Quiero ser yo, ser nada más que todo esto
Y se olvidan que yo también quiero ser
Ni Superyó ni Ello se acuerdan de escucharme